Imanes en los escape room

Cuanto más duras son las pruebas a las que nos enfrentamos en una sala de escape, más divertido es superarlas, aunque algunos de los enigmas a los que nos vamos a enfrentar conseguirán que perdamos la cabeza. Hoy, os enseñamos a resolver los enigmas que se hacen con imanes, para que podáis escapar lo antes posible.

¿Cómo funcionan los imanes en las salas de escape?

Un imán es un objeto que dispone de un campo magnético, y por lo tanto puede atraer otros metales. Los imanes son muy comunes en nuestra vida diaria, y cobran un especial significado en las salas de escape, por lo fácil que son de utilizar, y las miles de opciones que nos ofrecen.

Por norma general, encontraremos imanes en un escape room para:

• Atraer elementos que están fuera de nuestro alcance.
• Como parte de una cerradura electromagnética, que solo se abrirá al juntar las dos piezas.
• Como ayuda para completar otros puzzles.
• Si la sala de escape es de las difíciles, como distracción para hacernos perder el tiempo

¿Qué hacemos si encontramos un iman en un escape room?

En cuanto encontremos un iman, el primer paso debe ser mirar si tenemos algún enigma que aún no hayamos resuelto, donde pueda encajar. Los imanes necesitan partes metálicas, así que tendremos que buscar enigmas de este material.

Si debemos usarlo en zonas que esten señalizadas con una ruta o cuadrados (por ejemplo, un tablero de ajedrez), debemos tener en cuenta que la mayor parte de las veces nos indicarán la ruta que se ha de seguir (movimientos de piezas de ajedrez, lineas dibujadas en la zona).

Si el iman se encuentra en figuras de mayor tamaño (por ejemplo escudos o placas), normalmente serán para colocar en el lugar indicado, así que podemos buscar esa zona apoyando el iman contra ella. Aquí es importante tener en cuenta que la zona en cuestión puede estar cubierta de madera, por lo que no debemos confiarnos.

Si el imán está atado a un palo o extensor, la mayoría de las veces lo que debemos buscar estará situado en el techo o en algún agujero donde no podamos meter la mano, y tendremos que usar el iman para conseguir el objetivo (normalmente una llave).

Con estos simples trucos, ningún acertijo hecho con imanes se nos resistirá demasiado 🙂

Una anécdota sobre el uso de imanes

En una de las primeras partidas que jugué, al principio aparecía una figura imantada de un caballo de ajedrez, que mas adelante debíamos usar para conseguir una llave.

Una de las personas que jugaba la partida llevaba una enorme hebilla metálica donde se enganchó el iman sin que nos diéramos cuenta, y nos llevó un buen rato darnos cuenta de lo que estaba pasando, así que ¡mucho cuidado en vuestras partidas!